Karim Khan, fiscal jefe de la CPI, es objeto de investigación por presunta mala conducta, según fuentes

El órgano rector de la Corte Penal Internacional iniciará una investigación externa sobre su fiscal jefe Karim Khan por presunta mala conducta sexual, dijeron el viernes dos fuentes familiarizadas con el asunto.

La presunta víctima es una abogada muy respetada de unos 30 años que trabajaba directamente para Khan, según The Guardian. Los documentos vistos por el periódico británico muestran una acusación de tocamientos no deseados por parte de Khan y “abuso” desde abril de 2023 hasta abril de 2024.

En un incidente enumerado en el documento visto por The Guardian, Khan presuntamente “presionó su lengua” en la oreja de la mujer y una fuente informó de incidentes de manoseo. La presunta víctima también dijo a sus colegas que Khan había intentado tomarle la mano durante un viaje a Londres.

Durante otro viaje de trabajo, según los documentos del denunciante vistos por Associated Press, Khan supuestamente pidió a la mujer que se acostara con él en su cama de hotel y luego la “tocó sexualmente”. Supuestamente más tarde llamó a la puerta de su habitación de hotel durante 10 minutos a las 3 am.

“Las acusaciones no se relacionan con un solo incidente o un par de incidentes, sino con una mala conducta que se produjo durante un período de varios meses”, dijo una fuente de la CPI.

En un documento interno distribuido entre los estados miembros, se pide a Khan que renuncie temporalmente a su cargo en el tribunal permanente de crímenes de guerra del mundo, con sede en La Haya, mientras se lleva a cabo una investigación.

El documento sin fecha ni firma, al que tuvo acceso Reuters, fue distribuido entre los estados miembros por el personal de la CPI.

La oficina de Khan remitió las preguntas a su abogado y las llamadas telefónicas y las reiteradas solicitudes de comentarios enviadas a sus abogados no recibieron respuesta, según The Jerusalem Post.

Khan ha negado las acusaciones de mala conducta que se informaron al órgano rector del tribunal el mes pasado. En ese momento, pidió al propio órgano de supervisión interna del tribunal que las investigara.

Una fuente con conocimiento del asunto dijo que se acordó una investigación externa en una reunión celebrada el jueves de un grupo central del órgano rector del tribunal, la Asamblea de los Estados Partes.

Reuters no pudo determinar quién llevaría a cabo la investigación.

A pesar de que ahora se solicita al órgano de supervisión del tribunal que investigue las acusaciones, el personal informado de la CPI dijo a The Guardian que Khan había intentado en repetidas ocasiones persuadir a la víctima para que negara la presunta mala conducta. Estos intentos supuestamente se produjeron después de que se instruyera a Khan evitar las comunicaciones directas con la presunta víctima.

Los funcionarios, entre ellos Khan, dijeron las fuentes a The Guardian, dijeron a la mujer que escribiera una carta en la que afirmara: “Nunca he dicho esto. Él nunca me agredió”.

“Nuestro cliente niega todas las acusaciones y nos preocupa mucho que la exposición de un asunto interno confidencial y cerrado esté diseñada para socavar su trabajo de alto perfil en un momento delicado”, respondieron los abogados de Khan cuando The Guardian les pidió un comentario.

Órdenes de arresto contra el liderazgo israelí

Los jueces de la CPI están revisando actualmente una solicitud que Khan hizo en mayo para que se emitan órdenes de arresto contra el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, su jefe de defensa y los líderes de Hamás. Khan ha dicho que las acusaciones de mala conducta coincidieron con una campaña de desinformación contra su oficina.

“No hay verdad en las sugerencias de tal mala conducta”, dijo Khan en una declaración pública. “He trabajado en diversos contextos durante 30 años y nunca nadie ha presentado una queja como esa contra mí”.

Dos empleados denunciaron el presunto acoso semanas antes de que Khan anunciara que estaba investigando órdenes de arresto contra Netanyahu, informó Associated Press.

Aunque Khan hizo referencia a una campaña de desinformación que coincidió con la denuncia, The Guardian informó que la presunta víctima se abstuvo de presentar un informe oficial por temor a represalias y preocupaciones de que Israel o los opositores del tribunal pudieran explotarlo.

“Ella nunca quiso nada de esto”, dijo una persona cercana a ella. “Pero la denuncia presentada en contra de sus deseos, seguida de las negaciones de Khan y los intentos de suprimir las acusaciones, la han puesto en una posición muy difícil”.

El documento interno, que circuló para su discusión, argumentó que el organismo interno independiente del tribunal para evaluar cuestiones de conducta debería haber iniciado una investigación formal sobre las acusaciones cuando se informaron por primera vez.

Una fuente familiarizada con el asunto dijo que la presunta víctima en el caso Khan no confía en la independencia del organismo interno del tribunal, cuyo director entrante es un ex miembro del personal de Khan, porque se filtraron detalles de los informes que se le presentaron sobre la presunta mala conducta.

El director actual y futuro del organismo independiente no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.

El documento también muestra que aumenta la presión sobre Khan para que se haga a un lado temporalmente y deje que uno de sus fiscales adjuntos tome el control mientras se lleva a cabo la investigación.

“El fiscal debería hacerse a un lado con efecto inmediato para allanar el camino a una investigación independiente”, dice el documento. No quedó claro si el órgano rector del tribunal le ha pedido a Khan que lo haga.

La CPI es un tribunal permanente que puede procesar a individuos por crímenes de guerra, crímenes contra la humanidad, genocidio y crimen de agresión en los estados miembros o por sus nacionales. Su órgano rector celebrará su reunión anual a principios del próximo mes.

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