Mientras se recuperaba en el hospital tras la implantación de un marcapasos en el verano de 2023, los jefes de las FDI y del servicio de seguridad Shin Bet advirtieron al primer ministro Benjamín Netanyahu que los enemigos de Israel consideraban que las tensiones sociales por la reforma judicial del gobierno eran un momento oportuno para atacar, según un reporte del Canal 12, informó The Times of Israel.
El programa de investigación “Uvdá” también citó transcripciones de conversaciones iniciales de Netanyahu con su Secretario Militar minutos después de que Hamás invadiera el sur de Israel en la mañana del 7 de octubre de 2023.
La Oficina del Primer Ministro arremetió contra “Uvdá” y su conductora Ilana Dayan, al tiempo que tachó el reporte “calumnias y mentiras contra Netanyahu con el fin de dañar al gobierno de derecha”.
“La empresa de ingeniería consciente ‘Uvda’ continuará con la propaganda y la máscara de mentiras, mientras que el primer ministro Netanyahu continuará conduciendo a Israel a una victoria histórica”, decía el comunicado de su oficina, que rechazó una serie de afirmaciones del programa de investigación.
Según el reporte de “Uvdá”, Netanyahu fue contactado por Ronen Bar y Herzi Halevi la noche del 23 de julio de 2023, cuando estaba internado en el Centro Médico Sheba tras someterse a una cirugía por una dolencia médica una semana antes por la que fue hospitalizado y los médicos revelaron más tarde que se trataba de un “bloqueo cardíaco transitorio” potencialmente mortal.
Esto de produjo en medio de tensiones en Israel por la reforma judicial del gobierno, con manifestaciones masivas y reservistas de las FDI que renunciaron al servicio voluntario en protesta, mientras que otros amenazaron con dejar de presentarse a la reserva si se aprobaba una pieza clave de la reforma judicial.
En su conversación a través de una línea segura, Bar le dijo a Netanyahu: “Te estoy dando una advertencia estratégica de guerra”, según el reporte.
“No puedo decir cuándo ni cómo”, dijo el jefe del Shin Bet, “pero los enemigos de Israel observan lo que sucede en Israel en medio de la polarización por la reforma judicial, e identifican debilidades”. Bar presuntamente instó a Netanyahu a detener la legislación de la reforma.
Netanyahu también recibió una carta de Halevi, quien tenía previsto reunirse con él pero el encuentro de canceló debido a la hospitalización del Primer Ministro.
“La preparación de las FDI está siendo dañada y se está recuperando lentamente. Esto es peligroso. Lo que está sucediendo ahora en Israel aumenta la posibilidad de que seamos atacados”, escribió Halevi, según el informe, que dice que el jefe del Estado Mayor de las FDI dejó en claro su evaluación de que el enemigo no dejaría pasar esta oportunidad.
En respuesta, la oficina de Netanyahu insistió en que “el Primer Ministro no recibió ninguna advertencia y nadie se molestó en informarle antes del ataque. Si lo hubieran informado, el 7 de octubre habría sido totalmente diferente”.
En otro segmento del programa del jueves, “Uvdá” informó que en febrero de este año, el mayor general Avi Gil, secretario militar de Netanyahu, notificó a la Fiscal General después de que una taquígrafa le dijera que el jefe de gabinete de Netanyahu, Tzaji Braverman, la había presionado para altera la hora en una transcripción de la mañana del 7 de octubre.
Braverman fue interrogado por la policía bajo sospecha de haber alterado la hora de la primera llamada de Netanyahu con Gil durante las masacres de Hamás, de las 6:29 a.m. a las 6:40 a.m., cuando en realidad para ese momento habían hablado por segunda vez, después de que la taquígrafa rechazara su solicitud de cambiar la transcripción.
Citando el testimonio de Gil a la policía, el informe de televisión indica que después de que la taquígrafa le dijera que Braverman pidió ver la transcripción y modificarla, el Secretario Militar entró a la sala de conferencias de la Oficina del Primer Ministro para escribir una carta a la fiscal general, Gali Baharav-Miara informándole sobre la conducta de Braverman.
“Esto es una falsificación a todos los efectos. Es criminal”, se citó a Gil escribiendo en la carta.
La oficina de Netanyahu negó las acusaciones contra Braverman, diciendo que el asunto “se aclarará a fondo durante la investigación”.
La cadena también informó sobre las llamadas de Netanyahu con Gil en la mañana del 7 de octubre. El Secretario Militar llamó por primera vez al Primer Ministro a las 6:29 a.m. a través de WhatsApp.
Netanyahu, que estaba en su casa en Cesarea, habría preguntado: “¿Por qué están disparando [cohetes]?”.
Gil dijo que estaba recaudando información para entender lo que estaba pasando y que ambos hablarían pronto. La segunda llamada tuvo lugar a las 6:40 a.m. en una línea segura.
“Estamos tratando de entender qué está pasando”, dijo Gil en la segunda llamada. Agregó que los comandos de élite se dirigían a la zona fronteriza de Gaza y que la división militar regional estaba en estado de emergencia, según la transcripción citada en el informe. “No hay duda de que estamos en un incidente diferente”, dijo.
Netanyahu habría preguntado si era posible eliminar a los líderes de Hamás, y Gil dijo que comprobaría que no entrasen terroristas a Israel en medio del fuego de cohetes, y añadió: “Estamos en guerra”.
“Uvda” indicó que entonces Netanyahu afirmó por primera vez que no había sido informado por los jefes de seguridad sobre la posibilidad de un gran ataque desde la Franja de Gaza.
“No teníamos indicios, no veo nada en la inteligencia”, citó al Primer Ministro.
Gil dijo en respuesta que será necesario “hacer las preguntas más tarde [sobre] cómo nos sorprendieron”.
El reporte dijo que Netanyahu subrayó que se necesitaba medir el alcance de la ofensiva de Hamás y si el gobierno tendría que ordenar un llamamiento a filas de la reserva.
“El Estado Mayor debe reunirse lo más rápido posible”, habría añadido el Primer Ministro, y preguntó sobre secuestros.
“Eso es lo que pensamos”, respondió Gil.
Netanyahu ordenó a Gil que viera si era posible eliminar a los líderes de Hamás: “Si hay alguien disponible, elimínenlo, desde [Yahya] Sinwar hacia abajo”.
Horas más tarde, los ministros del gobierno mantuvieron una reunión, durante la cual “Uvda” informó que Smotrich dijo a los presentes que el público pronto exigirá sus renuncias.
“Tenemos unos días de legitimidad hasta que quede clara la magnitud del desastre. En 48 horas nos pedirán que renunciemos debido al fracaso, y tienen razón”, habría dicho Smotrich.
En respuesta al informe, la oficina de Smotrich dijo el jueves que no estaba al tanto de la cita y culpó a los jefes de seguridad por no haber podido evitar el 7 de octubre, afirmando que el gobierno tiene “legitimidad pública” para despedirlos.
Smotrich dijo por separado: “No sabía que existía una unidad llamada Nukhba antes del 7 de octubre, y soy una de las personas dedicadas en el gabinete de seguridad que leen y revisan materiales regularmente”.
“No sabía que una cuarta parte de la infraestructura que existe en el Líbano es de la Fuerza Radwan de Hezbolá. No nos lo dijeron. Hay enormes lagunas de información”, afirmó Smotrich durante una conferencia del Consejo Yesha por los asentamientos, y acusó a las autoridades de defensa de desobedecer regularmente a la esfera política.
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