Desclasificado: Más de 100 soldados de la Unidad Shaldag allanaron y desmantelaron un complejo subterráneo para la fabricación de misiles de precisión durante una operación especial de la FDI en Siria.
FDI: El 8 de septiembre de 2024, durante una operación especial de la Fuerza Aérea israelí, tropas de la Unidad Shaldag atacaron y destruyeron un complejo subterráneo para la fabricación de misiles de precisión en el área de Masyaf, en lo profundo del territorio sirio.
En la noche del 8 al 9 de septiembre, las FDI llevaron a cabo una inusual ola de ataques aéreos durante varias horas contra una instalación cerca de Masyaf en Siria. Los informes indicaron un número relativamente alto de víctimas sirias, así como un enfoque operativo diferente, incluido el uso de vehículos aéreos no tripulados por parte de las FDI para disuadir a las fuerzas de rescate de llegar al lugar. Las FDI revelaron que la operación implicó el despliegue de aproximadamente 100 comandos Sayeret Shaldag en suelo sirio para colocar trampas explosivas y destruir una instalación de producción de misiles incrustada en la ladera de una montaña, lo que dificultaba su destrucción desde el aire.
Durante años, la Dirección de Inteligencia llevó a cabo una amplia recopilación y seguimiento de inteligencia, lo que confirmó el valor del objetivo. En los meses previos a la operación, se lanzó un plan para que la Fuerza Aérea israelí lo destruyera.
Los soldados aterrizaron utilizando helicópteros, con apoyo de fuego y recopilación de inteligencia de aviones, aviones de combate y buques de guerra de la Armada israelí. El objetivo de la incursión era un complejo subterráneo en lo profundo del territorio sirio, financiado y apoyado por Irán. El complejo era un proyecto emblemático de los esfuerzos de Irán por armar a sus representantes terroristas en la frontera norte de Israel. El complejo incluía líneas de montaje avanzadas diseñadas para fabricar misiles guiados de precisión y cohetes de largo alcance, lo que aumentó significativamente el suministro de misiles a Hezbolá y otros representantes terroristas iraníes en la región.
Durante la operación, las fuerzas lograron hacerse con maquinaria crítica para la fabricación de misiles de precisión, incluido un mezclador planetario, numerosas armas y documentos de inteligencia, que fueron transferidos para su investigación. Los soldados destruyeron el complejo y regresaron sanos y salvos a territorio israelí.
Las FDI seguirán actuando de forma estratégica y profesional con diversos métodos y tácticas para eliminar las amenazas dirigidas a los ciudadanos de Israel.
Detalles adicionales
El corresponsal militar Doron Kadosh revela detalles adicionales sobre la operación Sayeret Shaldag en Masyaf, Siria:
En la operación participaron alrededor de 70 aeronaves: aviones de combate, aviones de transporte, helicópteros y vehículos aéreos no tripulados.
La fuerza Sayeret Shaldag que participó en la operación contaba con alrededor de 100 combatientes y formaba el núcleo de la misión. Junto con ellos, unos 20 miembros de la Unidad 669 también entraron en territorio sirio.
Los 120 efectivos llegaron en cuatro helicópteros “Yas’ur” (CH-53), que despegaron desde Israel y volaron durante aproximadamente una hora y media para alcanzar el objetivo, lo que incluyó el reabastecimiento aéreo en el camino.
Una vez dentro del territorio sirio, se necesitaron 18 minutos más de vuelo bajo fuertes amenazas aéreas para llegar a la zona de aterrizaje. El área está densamente protegida por docenas de baterías de misiles tierra-aire.
La primera fuerza de desembarco estaba compuesta por unos 50 cazas. Su trabajo era asegurar el perímetro y neutralizar las amenazas para que la segunda fuerza pudiera aterrizar de manera segura y llevar a cabo el asalto principal a la instalación.
La segunda fuerza, el equipo de asalto, aterrizó en un helipuerto diferente y tuvo que correr aproximadamente 700 metros desde la zona de aterrizaje hasta las puertas del sitio subterráneo.
El equipo de asalto se movió a través del “corredor de producción” de misiles, recorriendo habitación por habitación, colocando las cargas explosivas correctas en cada máquina (en el tamaño y la cantidad correctos) y, lo más importante, localizando los mezcladores planetarios, el componente crítico para la producción de misiles. Los tres mezcladores fueron encontrados en las salas B4, B5 y B6, en el corazón del complejo.
Después de manipular las instalaciones, las fuerzas se retiraron a una distancia segura. El zapador de la unidad, identificado como “S”, detonó casi una tonelada de explosivos mientras los combatientes aún estaban en tierra.
Finalmente, los soldados corrieron hacia los helicópteros que los esperaban en tierra y volaron una hora y media de regreso a territorio israelí.
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