El ministro de Justicia, Yariv Levin, y el canciller Gideon Sa’ar dieron a conocer este jueves una nueva propuesta de reforma judicial.
Las reformas proponen modificar ligeramente la composición del Comité de Selección Judicial; establecer un mecanismo formal para diferenciar la aprobación de las Leyes Básicas, que en Israel tienen carácter semiconstitucional, de las leyes normales; prohibir la revisión judicial de las Leyes Básicas, excepto las relacionadas con los derechos de voto; y exigir una mayoría de todos los jueces de la Corte Suprema antes de que se pueda anular alguna ley aprobada por la Knéset.
Todas las reformas entrarían en vigor recién en el próximo mandato de la Knéset, es decir, después de las próximas elecciones.
La semana que viene se convocará una votación para elegir a un nuevo presidente de la Corte Suprema, en la que probablemente se elegirá a Isaac Amit, quien funge actualmente como su presidente interino, a pesar de la intensa oposición de Levin a su nombramiento.
Los ministros afirman que el paquete de reformas fue ideado entre los dos, junto con el exministro del gabinete Yizhar Shai, un exaliado de Benny Gantz, y el general de las reservas Dedi Simchi, y describe el acuerdo como “una enmienda histórica” que se ha estado preparando durante un año y medio.
Según la reforma, el número de miembros del Comité de Selección Judicial se mantendrá igual, en nueve.
El número de miembros del gobierno en el Comité se mantendrá en tres, el número de representantes de la oposición se mantendrá en uno y el número de jueces de la Corte Suprema también se mantendrá en tres.
Sin embargo, los dos representantes del Colegio de Abogados de Israel serán eliminados en favor de abogados con experiencia en litigios. Uno será elegido por el gobierno y otro por la oposición.
Los nombramientos judiciales para tribunales inferiores se harán por una mayoría simple de cinco votos en el comité, y deben incluir a un miembro del gobierno, la oposición y un juez de la Corte Suprema.
Los nombramientos para la Corte Suprema también se harán por una mayoría de cinco, y deben incluir a un miembro de la coalición y a un miembro de la oposición.
Según Levin y Sa’ar, este acuerdo significa que los representantes de la Corte Suprema no tendrán poder de veto sobre los nombramientos de miembros de dicho tribunal.
Al mismo tiempo, los dos ministros señalan que un juez de la Corte Suprema no podrá ser nombrado únicamente por representantes del gobierno, o por representantes del Poder Judicial y de la oposición únicamente.
Conforme al paquete de reformas, las Leyes Básicas sólo podrán abordar cuestiones clave de la identidad judía y democrática del Estado, los derechos humanos y aspectos del gobierno.
La legislación de las Leyes Básicas será diferente de las leyes ordinarias, lo que aumentará su rango constitucional.
Los ministros afirman que no será posible cambiar las Leyes Básicas “de repente” o debido a las necesidades del gobierno. Sin embargo, no especifican exactamente cuál será el proceso para aprobar las Leyes Básicas.
Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudío