Uno de cada cinco alemanes votó por la ultraderecha en las últimas elecciones de Alemania. La tendencia parece consecuente con lo que ocurre en buena parte de Europa y en Estados Unidos.
¿Estamos ante la amenaza de una vuelta al nazismo? ¿Cómo podría verse afectada la comunidad judía de Alemania? Para entender el fenómeno, nuestra colaboradora Maxine Dovere entrevistó a Jeremy Issacharoff, embajador de Israel en Alemania 2017- 2021
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Maxine Dovere: La ultraderecha alemana pretendía revocar la ciudadanía alemana, inicialmente a inmigrantes con antecedentes penales, por supuesto. Pero si retrocedemos en la historia alemana, los alemanes tienen un historial muy específico de retirar la ciudadanía, quizás comenzando en 1933. ¿Podría comentar sobre la historia de la revocación de ciudadanías, específicamente de la población judía?
Jeremy Issacharoff: Mira, antes que nada, creo que en las elecciones de ayer, el partido que obtuvo la mayoría más alta y que podrá nombrar a un canciller es el Partido Demócrata Cristiano, que es el partido de Angela Merkel, liderado actualmente por Friedrich Merz.
Ahora, la otra parte de esto, que no deberíamos confundir a los espectadores, es la elección del AfD, que es el partido Alternativa para Alemania, un partido que, diría yo, es considerado de extrema derecha en el panorama político alemán y en el Bundestag.
Friedrich Merz, el canciller designado, dejó muy claro que el AfD no formará parte de la coalición que él liderará. Por lo tanto, la única posibilidad realista que tiene de formar una coalición será con el Partido Laborista, el SPD, encabezado por Olaf Scholz, quien probablemente no continuará en su cargo.
Esto significa que, si bien el tema de la inmigración es complicado y no cabe duda de que Alemania se está inclinando hacia la derecha debido a ello, si Merz necesita formar una coalición con el Partido Laborista, tendrá que moderar estos llamados a retirar la ciudadanía a ciertas personas.
En mi opinión, serían muy cautelosos y evitarían acercarse a la idea de revocar la ciudadanía de ciudadanos alemanes de origen judío. En conclusión, creo que hay que ser prudentes y esperar a ver cómo se desarrollan los acontecimientos, pero no creo que esto vaya a afectar a la población judía que vive en Alemania.
M.D.: Sabemos que hay un giro hacia la derecha en muchos lugares. Ciertamente en Estados Unidos, también en Hungría. En Serbia hay un gobierno de derecha, aunque soy consciente de que actualmente hay protestas contra ese gobierno. ¿Cree que este giro a la derecha puede continuar en los próximos diez años?
J.I.:: Podría continuar. Pero, nuevamente, en términos europeos y en comparación con otros países como Polonia y Hungría, e incluso con la derecha en Francia, diría que el CDU, el Partido Demócrata Cristiano, sigue siendo un partido más tradicional. Aunque espero que Friedrich Merz sea un poco más de derecha que Angela Merkel, todavía lo consideraría un conservador tradicional y no un extremista de derecha.
M.D.: Hablando del 20% de votos obtenidos por la AfD, ¿qué implica esto para la comunidad judía en Alemania, a pesar de los esfuerzos del gobierno por fomentar la vida judía?
J.I.: En primer lugar, Alemania enfrenta varios dilemas estratégicos. El apoyo a Ucrania en la guerra contra Rusia y el ascenso de Donald Trump, quien ha criticado a Europa y a Ucrania, son factores clave. Además, la economía alemana está bajo presión con un gasto gubernamental limitado por ley.
Por otro lado, la inmigración es un tema crucial. La AfD ha obtenido apoyo debido a la preocupación pública por el número de inmigrantes musulmanes y los recientes ataques terroristas perpetrados por algunos de ellos. Estos factores generan tensiones en la sociedad alemana.
Alemania es el líder de Europa, y Europa enfrenta múltiples desafíos que creía haber superado. Estos temas afectan la seguridad nacional y la estabilidad del país.
M.D.: ¿Cree que los israelíes de ascendencia alemana deberían de preocuparse ahora?
J.I.: Personalmente, no puedo ver al gobierno alemán actuar de una manera que afecte a la vida de la comunidad judía. Conozco bien al gobierno alemán, trabajé allí durante cinco años. Nombraron a un comisionado contra el antisemitismo y también para fomentar la vida judía en Alemania. No se debe olvidar la segunda parte del título.
Están muy interesados en fortalecer la comunidad judía, y esto lo incluyo también con Friedrich Merz. Vería al CDU como un partido muy positivo. Primero, es positivo hacia Israel. Su partido ha sido muy positivo tanto con Israel como con el pueblo judío en su conjunto, y también con los ciudadanos judíos alemanes que aún viven en Alemania, junto con los ciudadanos israelíes que también viven allí.
No puedo verlos haciendo algo que impacte negativamente en la vida de la comunidad judía.
Creo que habrá preocupaciones pequeñas debido al hecho de que el AfD, Alternativa para Alemania, liderado por Alice Weidel, haya recibido el 20% de los votos, lo que representa unos 10 millones de alemanes.
Y sabes, cuando fui embajador en Alemania, no tuvimos absolutamente ningún contacto con el AfD, ni a nivel federal ni a nivel estatal.
Alice Weidel es nieta de un juez de la era nazi que fue nombrado personalmente por Hitler. Algunos alemanes incluso los llaman un partido neonazi. Yo diría que, como mínimo, son un partido con una nostalgia muy marcada por la era nazi, y creo que eso es lo que realmente preocupa.
De nuevo, Friedrich Merz ha dicho claramente que hay un cortafuegos. No formarán una coalición con el AfD, y no querrán estar en coordinación ni cooperación con ese partido, lo cual creo que es una declaración muy importante que también debería resonar firmemente en la comunidad judía allí.
M.D.: Tomemos el punto que pusiste sobre la mesa: ese 20% de la población alemana… ¿Qué implica eso para la población judía en Alemania, a pesar de los esfuerzos del gobierno para incentivar la vida judía allá? ¿Qué nos dice ese 20% de voto neonazi?
J.I.: Mira, en primer lugar, esto llega en un momento en que diría que el pueblo alemán en su conjunto está atravesando varios dilemas, un dilema estratégico debido a la guerra en Ucrania y su fuerte apoyo al gobierno ucraniano. Y ahora el ascenso del presidente Trump, quien se ha manifestado en contra de Ucrania y ha lanzado comentarios negativos sobre Europa.
He estado allí. También ha habido reuniones entre Elon Musk y el líder del AfD, así como el vicepresidente. Vance estuvo recientemente en la Conferencia de Seguridad de Múnich y se negó a reunirse con el canciller Olaf Scholz, pero se reunió con el líder del AfD. Así que estas señales, en primer lugar, han generado una gran dificultad en cuanto a cómo se posiciona el pueblo alemán.
Estamos, obviamente, preocupados por Rusia, por lo que han hecho en Ucrania, la nueva amenaza para Europa. Cuando trabajaba en Alemania entre 2017 y 2022, Alemania no estaba en un sentido, ya sabes, en una situación de guerra en el continente alemán. Y luego ocurrió, Rusia atacó Ucrania, y obviamente cambió toda su seguridad nacional.
Entonces, en primer lugar, hay, digamos, un dilema estratégico aquí entre Rusia, la amenaza de Rusia, y también la tradicional dependencia de Estados Unidos como un gran aliado. En segundo lugar, la economía, que también ha pasado por muchas tensiones últimamente.
Hay mucha preocupación. Habrá un dilema entre el aumento del gasto público, que está limitado por la ley, ya que no pueden tener un gasto deficitario más allá de una cierta cantidad, y, por otro lado, deben 34 , pero también tienen que invertir en la seguridad social de su propio pueblo y en el bienestar social. Así que ahora habrá un dilema. Y en términos de cómo mantener sus medidas de seguridad nacional en relación con Ucrania, y cómo reiniciar su economía.
Y tercero, está el tema de la inmigración, en el que el AfD se ha vuelto muy fuerte. Y esa es una de las razones por las que obtuvieron el 20% de los votos, porque la gente está muy preocupada por la inmigración, por el número de, digamos, musulmanes que están llegando a Alemania. Y también, en términos de los recientes ataques terroristas dentro de Alemania, llevados a cabo por inmigrantes musulmanes.
Esto también ha causado una gran preocupación. Así que tienes todo esto, y solo estoy hablando de tres grandes tensiones. Pero un lugar como Alemania, obviamente, sabes, es un líder en Europa y Europa en general está atravesando muchos desafíos en este momento, desafíos que pensaban que nunca tendrían que enfrentar nuevamente.
M.D.: Me gustaría que pasaras al desafío en el que Israel se ha metido al alinearse con el voto ruso-estadounidense en esta reciente votación y cómo Alemania, un importante proveedor de armas para Israel, no solo para Ucrania, sino también un aliado de Israel, está reaccionando ante este nuevo desarrollo.
J.I.:Bueno, francamente, como saben, he estado retirado del servicio exterior durante los últimos dos años. Y no habría tomado una decisión así ni votado en contra de esta resolución. Pero, ya sabes, no creo que haya sido apropiado lo que hicimos, pero lo hicimos.
Y creo que será motivo de preocupación para países como Alemania. Pero, nuevamente, hay un gobierno en Israel que está mirando muy de cerca hacia Washington, y quiere mantenerse altamente coordinado con Washington. Pero, en mi opinión, debería haber ciertas limitaciones. Y creo que estaría bastante preocupado por este tipo de decisión, y personalmente no habría tomado ese rumbo.
M.D.: ¿Cómo se puede mejorar esa decisión? ¿Y cómo pueden los aliados europeos sentirse seguros o ser tranquilizados respecto a la posición de Israel en relación con esta alianza?
J.I.: Bueno, hasta ahora creo que la gente entiende que Israel se encuentra en una posición muy difícil y complicada. Rusia no es simplemente un problema lejano desde nuestro punto de vista. Esto puede haber cambiado recientemente con la caída del régimen de Assad, donde Rusia estaba muy firmemente establecida.
En los últimos años, hemos intentado mantener nuestras relaciones con Rusia y evitar que se conviertan en un conflicto directo. Y creo que había un gran nivel de comprensión respecto a lo que Israel estaba tratando de hacer: evitar un choque directo con Rusia, pero también mostrar cierto apoyo a Ucrania.
Teniendo en cuenta que, sea como sea que se mire, Ucrania no atacó a Rusia, sino que fue al revés, nuestra postura hasta ahora ha sido entendida. En cuanto a esta votación en la ONU, siendo sincero, las votaciones en la ONU no son lo más importante del mundo. No cambian realmente las realidades sobre el terreno.
Sin embargo, creo que no envía el mensaje correcto. Israel debería haber mantenido la misma posición que tenía antes de esta votación.
M.D.: ¿Cómo cree que Israel pueda recuperar la confianza de sus aliados?
J.I.: Mira, primero que nada, creo que, tal vez porque fui embajador en Alemania, pero creo que Alemania es el socio crítico que Israel tiene en Europa. Es el aliado estratégico más importante que tenemos. Tenemos relaciones muy profundas y estrechas entre nuestras instituciones de seguridad.
Una de las primeras cosas que hice fue firmar un contrato para tres nuevos submarinos con Alemania. Durante ese tiempo, recibimos cuatro corbetas para nuestra armada. Alquilamos los UAVs a Alemania para sus fuerzas de mantenimiento de la paz. Y no olvidemos que los alemanes están comprando el programa de defensa antimisiles Arrow 3.
Y eso no es todo, también tuvimos un intercambio de seguridad e inteligencia muy cercano e íntimo con Alemania. Así que, primero que nada, estábamos muy cerca de Alemania y debemos mantener esa relación. Y creo que desde ese punto de vista, Friedrich Merz será un muy buen socio para mantener esa relación, mantenerla fuerte e incluso mejorarla.
Y creo que a través de eso podemos llegar al resto de Europa, pero debemos hacerlo. Europa se está volviendo mucho más complicada con, como mencionaste antes, el ascenso de los partidos de extrema derecha en otros países.
Ahora bien, Alemania es un tema particular porque la extrema derecha se conecta con el pasado nazi, lo cual es muy sensible, pero también es muy sensible para los propios alemanes. Y si Friedrich Merz no va a formar ninguna coalición con ellos, entonces creo que sería perfectamente apropiado que Israel no tuviera absolutamente ningún contacto con el AfD.
Así que, para responder a tu pregunta, primero que nada, debemos trabajar en nuestra relación con Alemania. Creo que Friedrich Merz será positivo hacia Israel, pero no veo a Alemania abandonando la idea de una solución de dos Estados como un objetivo entre Israel y los palestinos.
Así que, ya sabes, creo que tomaremos las cosas poco a poco, pero no olvidemos que tomará algo de tiempo para que se establezca una nueva coalición. Y eso podría tomar tiempo, porque ahora hay muchos dilemas dentro de Alemania entre los conservadores y los laboristas, necesitarán muchos compromisos y eso podría llevar tiempo para resolver.
M.D.: Embajador, me gustaría conocer su posición respecto al asunto de los 63 rehenes que permanecen en manos de Hamás.
J.I.: Mi posición es muy clara. Necesitamos traer de vuelta a todos nuestros rehenes, ya sea vivos o muertos, a Israel. Esta guerra debe terminar y debe terminar lo antes posible. No quiero más acuerdos de rehenes por fases, uno tras otro. Creo que todo el acuerdo debería ser un intercambio único de rehenes. Y como dije, todos vivos y los que no lo estén, que sus familias reciban a sus seres queridos y también darles a las demás familias de los fallecidos la posibilidad de un cierre.
Esto ha sido una experiencia profunda y traumática para Israel. Hoy, enterramos a Oded Lifshitz, y diría que todo el país contuvo la respiración, y mañana ni siquiera puedo comenzar a imaginar la cantidad de lágrimas que se derramarán cuando enterramos a Shiri Bibas, a Kfir y a Ariel, esos hermosos niños. Es un trauma que debemos superar. Necesitamos dejar esto fuera de nuestra agenda. Y necesitamos que esta agenda de los rehenes, ya sabes, que vuelvan todos con sus familias, donde pertenecen.
Y luego podremos comenzar el camino hacia la recuperación. Estos han sido 16 meses traumáticos para todos nosotros. Hemos perdido alrededor de 1,840 ciudadanos y soldados. Ha sido un golpe masivo para nosotros. Y ahora, francamente, después de todo este tiempo, con todo este sufrimiento, Israel está en una posición más fuerte. Hamas está muy debilitado. Hezbollah ha sido seriamente debilitado. Assad ha caído, y eso podría ser un horizonte diferente en Siria.
Los iraníes nos atacaron dos veces con enormes ataques con misiles, y eso demostró ser una muestra de debilidad, porque el 99% de los misiles fueron interceptados. Así que la posición estratégica de Israel después de la caída del 7 de octubre ha aumentado y se ha fortalecido mucho. Y es en este momento que necesitamos adoptar un horizonte político importante y viable, en mi opinión, con los palestinos.
Necesitamos salir de esta crisis con los comienzos de una solución al problema palestino.
M.D.: En ese sentido, ¿la conversación que provenga de Washington tendrá un valor positivo o negativo?
J.I.: Bueno, mira, primero que nada, como sabes, Trump ha hecho dos cosas. Primero, ha puesto mucha presión para que se realice la liberación de rehenes, lo cual, sinceramente, aunque no soy uno de sus seguidores, le felicito mucho por haber presionado para que esto se lograra, y espero que insista en que todos los rehenes deben regresar a casa y que la guerra termine. Eso es lo primero.
Lo segundo, también surgió con la idea de transferir alrededor de un millón y medio de palestinos desde Gaza. Ahora, francamente, creo que esto no es una posibilidad realista de ninguna manera. Pero lo que ha sucedido como resultado de esto es que los países árabes, Arabia Saudita, Egipto, están considerando soluciones más realistas, y también incluyo a Jordania.
Y espero que, con esta nueva y mejorada posición estratégica en la que se encuentra Israel, podamos consolidar nuestros tratados de paz con Egipto y Jordania y, con suerte, mirar un horizonte político con los palestinos que podría involucrar a Arabia Saudita, y si podemos incluir a Arabia Saudita, no excluyo la posibilidad de poder alentar a Siria a seguir esta dirección.
Y eso también podría tener un impacto muy profundo en el Líbano. Así que, aunque aún estamos en el trauma de la guerra, aún necesitamos mirar las posibles oportunidades que tenemos por delante. Y espero que el presidente Trump vea esto y adopte una visión que no sea esta idea de transferir de Gaza…
Que en mi opinión no es el camino a seguir. El camino a seguir es tener una vía creíble y acordada hacia un horizonte político, como tal vez una solución de dos Estados, una confederación… ¡Cualquier cosa!, pero no podemos salir de esta crisis sin una solución viable al conflicto israelí-palestino, y eso podría traernos un cambio tremendo en la arquitectura regional del Medio Oriente.
M.D.: ¿Nos daría un comentario final sobre lo que espera para Israel en los años que vienen?
J.I.: Nos hemos defendido y hemos defendido a nuestro pueblo. Necesitamos dar un paso más y no solo pensar en lo que se puede hacer militarmente, sino en lo que podemos hacer políticamente, cómo podemos reforzar nuestros tratados de paz con Jordania y Egipto, cómo podemos extenderlos para incluir a Arabia Saudita y también expandir nuestras relaciones con otros países árabes en la región.
Esto, para mí, sería la victoria definitiva contra Hamas. No olvidemos que Hamas no entró en guerra el 7 de octubre solo para matar israelíes. Querían eliminar cualquier posibilidad de una mayor normalización, de paz entre Israel y sus vecinos. Por eso digo que la agenda de paz sería la mayor victoria que podríamos lograr.
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