El primer ministro, Benjamín Netanyahu, respondió este jueves con dureza al exjefe del Shin Bet, Nadav Argaman, alegando que está llevando a cabo una campaña de presión mediática sin precedentes en su contra.
“Esta noche, se ha hecho otra cosa inimaginable en la democracia israelí”, declaró Netanyahu.
El señalamiento de Netanyahu llegó luego de que el Canal 12 emitiera una entrevista con el exjefe del Shin Bet, Nadav Argaman, quien es un crítico del mandatario.
En la platica, Argaman alegó tener información delicada sobre Netanyahu que, dijo, un día publicará si así lo ve necesario.
“Nunca, en toda la historia de Israel ni en la historia de las democracias, un exjefe de un servicio secreto ha chantajeado en directo por televisión a un primer ministro en funciones. Este delito se suma a toda una campaña de chantaje a través de ruedas de prensa en los últimos días, liderada por el actual jefe del Shin Bet, Ronen Bar“, declaró.
“El único propósito es intentar impedirme tomar las decisiones necesarias para rehabilitar el Shin Bet tras su flagrante fracaso del 7 de octubre. Que quede claro: las amenazas criminales, al estilo de la mafia, no me disuadirán. Haré lo necesario para garantizar la seguridad de los ciudadanos de Israel“.
El ShinBet respondió: “Esta es una acusación grave contra el jefe de una organización estatal en Israel. El jefe del Shin Bet, Ronen Bar, dedica todo su tiempo a cuestiones de seguridad, a los esfuerzos por el retorno de los rehenes y a la defensa de la democracia. Cualquier otra declaración al respecto carece de fundamento”.
En la entrevista, Argaman afirmó: “La intimidad entre el jefe del Shin Bet y el Primer Ministro es de gran importancia, y no creo que sea apropiado dañarla para garantizar la integridad de la relación, los vínculos de trabajo y la transparencia que debe existir entre ambos.
“Por eso, actualmente mantengo en privado todo lo ocurrido entre el Primer Ministro y yo en ese espacio. Es absolutamente evidente que poseo amplios conocimientos y podría utilizarlos, pero me abstengo de hacerlo por las razones que mencioné.
Cuando se le preguntó cuándo los utilizaría, respondió: “Si llego a la conclusión de que el Primer Ministro ha decidido actuar contra la ley, entonces, si no hay otra opción, diré todo lo que sé, algo que me he abstenido de hacer hasta ahora para preservar la importancia de la relación entre el jefe del Shin Bet y el Primer Ministro».
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