Aviones israelíes atacaron antiguos puestos avanzados del ejército sirio en la provincia central de Homs, informaron el martes a Reuters dos fuentes de seguridad.
Esto parece ser el último de una serie de ataques contra infraestructura militar del derrocado régimen de Assad, que cayó en manos de insurgentes islamistas en diciembre.
Los aviones bombardearon fortificaciones militares en las aldeas de Shinshar y Shamsin, al sur de la ciudad de Homs, en el centro de Siria, según las fuentes.
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Según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, con sede en el Reino Unido y cuya financiación no está clara, “los ataques aéreos israelíes tuvieron como objetivo un batallón de misiles” cerca de la ciudad de Homs, e informaron de explosiones en la zona sin que se registraran víctimas de inmediato.
Las Fuerzas de Defensa de Israel no hicieron comentarios sobre los presuntos ataques.
Sin embargo, el ejército reconoció varios ataques con drones el martes por la mañana contra infraestructura militar que, según afirmó, representaban una amenaza para Israel cerca de la ciudad de Khan Arnabeh, en el sur de Siria.
La noche anterior, las FDI confirmaron que estaban llevando a cabo una serie de ataques contra objetivos militares en la zona de Daraa, dirigidos contra cuarteles generales y otras instalaciones utilizadas para almacenar armas y equipos pertenecientes al antiguo régimen sirio.
Afirmaron haber identificado intentos de uso de dichas armas por parte de grupos no especificados.
Israel ha declarado que seguirá actuando contra todas las amenazas en Siria mientras el nuevo régimen del país lucha por consolidar su poder tras el colapso del régimen de décadas de la familia Assad.
Si bien el colapso del régimen de Assad puso fin a más de una década de guerra civil en el país, una nueva ola de violencia sectaria generó temores de que el nuevo gobierno no pudiera mantener eficazmente la paz en Siria.
Los líderes israelíes han declarado reiteradamente que no confían en el líder interino del país, el excombatiente rebelde islamista Ahmed al-Sharaa, a quien el ministro de Defensa, Israel Katz, ha calificado de “líder islámico extremista”.
Sharaa ha desestimado las amenazas de Israel y los comentarios de Katz como “absurdos”, y su gobierno ha denunciado los continuos ataques israelíes en el país, así como la presencia de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) en una zona de contención en el sur de Siria.
Las FDI describen su presencia en la zona de contención, que estuvo ocupada por fuerzas de paz de la ONU hasta el derrocamiento del régimen de Assad en diciembre, como una medida temporal y defensiva, aunque el primer ministro, Benjamín Netanyahu, declaró el mes pasado que las tropas permanecerían allí “indefinidamente” para mantener la seguridad de Israel.
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