El ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben-Gvir, y el jefe de la Policía, Danny Levy, realizaron una evaluación especial de la situación en el Kotel este viernes, con la participación de altos mandos policiales, en previsión de la continuación de las medidas de seguridad en Jerusalén durante el mes de Ramadán.
A la reunión asistieron el comisario adjunto Avshalom Peled, el comandante del distrito de Jerusalén, general de división Amir Arzani, el comandante de la policía fronteriza Yitzhak Brik y el general de división Limor Noah.
Se han desplegado alrededor de 3.000 efectivos de la policía del distrito de Jerusalén, la policía fronteriza y refuerzos en toda la capital para garantizar la seguridad y la correcta celebración de las oraciones del Ramadán, a la vez que se aplican con firmeza medidas para prevenir la incitación, el terrorismo y la violación de la soberanía de Israel.
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El ministro Ben Gvir comentó sobre su regreso al cargo tras un receso: “Me complace regresar a mi puesto tras dos meses. Felicito al comisario de policía y a la policía por su inquebrantable lucha contra los instigadores y simpatizantes del terrorismo.
“Esto es un gran orgullo. Presencié personalmente el orden ejemplar en el partido del Beitar, gracias a la policía de Jerusalén. Es importante que tengamos una fuerza policial fuerte en la capital, y así debe seguir siendo”.
Ben Gvir añadió: “Tenemos tolerancia cero con las banderas de la OLP y las marchas en apoyo al terrorismo. Los judíos merecen libertad de movimiento como todos los demás. Necesitamos facilitar la vida a los residentes del Barrio Judío, quienes no tienen que sufrir durante el Ramadán“.
Levy enfatizó los desafíos que enfrenta la policía durante este período: “Nos encontramos en medio de un período difícil: la guerra en Gaza, el terrorismo, la delincuencia y los incidentes de orden público”. Los policías, soldados y voluntarios trabajan día y noche, con dedicación y profesionalismo, en condiciones difíciles.
Según Levy, además de las operaciones de seguridad, la policía mantiene la libertad religiosa: “Además de abordar estos desafíos, también permitimos la libertad de culto para los musulmanes, al tiempo que garantizamos las oraciones, la circulación y los eventos durante el Ramadán“.
En los últimos días, detectives del Departamento de Policía del Distrito de Jerusalén, en colaboración con el Shin Bet, arrestaron a once jóvenes terroristas de Issawiya, quienes fueron sorprendidos lanzando piedras contra vehículos israelíes, lo que provocó daños a un vehículo particular.
Tras una rápida investigación, la Fiscalía del Distrito de Jerusalén presentó una acusación contra ellos.
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